En la oficina 402 del lujoso edificio de
Interbolsa, en el norte de Bogotá, existía una caja fuerte, de color gris,
con clave digital, en donde se guardaban cientos de millones de pesos en
efectivo.
La plata, a veces en dólares, provenía de “inversionistas amigos” que no
querían dejar rastro de esas operaciones. Y la caja fuerte estaba a disposición
de Premium Capital Investment, firma que crearon Juan Carlos Ortiz, accionista
de Interbolsa, y Tomás Jaramillo, hijo del dueño, para direccionar las
inversiones que realizaba el Fondo Premium de Curazao, uno de los tentáculos de
Interbolsa en el exterior.
Días después, las inversiones aparecían en Curazao sin que la plata saliera
de Colombia.
“Semanalmente, Juan Carlos y Tomás pedían el efectivo y se
lo llevaban en maletines. Pero a los pocos días, la caja se les volvía a
llenar”, dijo un ejecutivo de Interbolsa.
Investigadores están seguros de que fue uno de los tres atajos habilitados
desde hace más de seis años para captar fondos de manera irregular y luego
inyectarlos al sector financiero a través de operaciones legales.
Los otros atajos funcionaban en la empresa Rentafolio Bursátil y en la hasta
ahora desconocida Intertourist.
La gran hipótesis que se maneja es que con esas jugadas se favoreció a una
red que quería ocultar la recepción de fuertes sumas de dinero, ya fuera para
evadir impuestos o para no darles explicaciones a las autoridades sobre su
origen.
Ese flujo irregular de fondos irrigó las cuentas y empresas de varios
accionistas de Interbolsa, como Proyectar Valores, y ayudó al crecimiento
exponencial del grupo, que pasó de ser un modesto puesto de bolsa en Medellín a
ser un influyente conglomerado empresarial.
En libros, Premium alcanzó a manejar unos 170 millones de dólares, pero
testigos hablan de otra contabilidad paralela, llevada a mano en agendas y
cuadernos.
Parte del dinero captado irregularmente se le prestó al italiano Alessando
Corridori para que siguiera negociando con los repos de Fabricato, y manipulando
el precio de sus acciones. Esas transacciones riesgosas, castigadas con
cárcel, fueron las que terminaron agotando la liquidez de la comisionista de
Interbolsa, y precipitaron su intervención y la posterior quiebra del
grupo.
Además, los llevó a realizar gambetas financieras ‘suicidas’, ahora bajo la
lupa de la Fiscalía. Una de estas fue el préstamo ficticio, por $ 80.000
millones, a la Clínica Candelaria –revelado por EL TIEMPO–, con el que
intentaban tapar uno de los grandes huecos dejados por los repos.
Los investigadores rastrean la conexión de esos movimientos irregulares con
inversiones en Proyectar Valores, por ejemplo, las de Enertolima y
Enerpereira.
Al respecto, el congresista Simón Gaviria sospecha que allí fueron a parar
varias de las comisiones que se pagaron por los contratos que los Nule
obtuvieron en Bogotá y en otras partes del país.
Y aunque los abogados de los Jaramillo y de Ortiz no descartan que en Premium
e Interbolsa se hubiera violado el régimen cambiario y hasta evadido impuestos,
niegan la captación ilegal y el blanqueo.
¿Quiénes sabían en Interbolsa de esos atajos financieros? ¿Qué tanto
permearon a todo el grupo empresarial? ¿Cuándo y cuántos accionistas y
ejecutivos cruzaron la línea de la legalidad?
Eso lo tendrá que establecer la Fiscalía, que ya está lista para ordenar las
primeras capturas de un escándalo que estalló en noviembre de 2012 y que puede
dejar pérdidas cercanas a 690.000 millones de pesos.
Para despejar estos interrogantes va a pesar el hecho de que, tal y como se
reveló, Rodrigo Jaramillo Correa, fundador de Interbolsa, y su hijo
Tomás hayan decidido colaborar con la justicia.
Incluso, fuentes de la Fiscalía le confirmaron a este diario que los
Jaramillo les ofrecieron aceptar dos de los cuatro cargos que se les imputarán
en 22 días: manipulación de acciones, administración desleal, operaciones no
autorizadas y concierto para delinquir.
Y aunque sus abogados digan lo contrario, también hay evidencia de blanqueo.
Tanto así que la fiscal del caso, Alejandra Ladino, incorporó a la investigación
a expertos de la Unidad de Lavado. Además, a un delegado ante la Corte Suprema
que indagaría la posible participación en estos hechos de un funcionario con
fuero.
Juan Carlos Ortiz, a quien algunos señalan de ser el cerebro de las
operaciones cuestionadas, aún no le ha hecho ninguna oferta a la Fiscalía. Pero
tal como lo informó Semana.com, busca un acercamiento con el abogado Jaime
Granados –quien defiende los intereses de las víctimas de Premium–, para
intentar recuperar parte del dinero embolatado. Se conoció detalles de
ese acuerdo.
Cuando se les preguntó a los investigadores cómo se explicaban que nadie
hubiera detectado estas conductas, que terminaron golpeando al sistema bursátil
del país, alegaron que estaban cubiertas con el halo de legalidad de
Interbolsa.
“Su posición dominante en el mercado bursátil (alcanzó a manejar el 35 por
ciento) y en círculos de poder los hizo intocables por años. También jugó a su
favor la debilidad en algunos controles y la filigrana financiera con la que
ejecutaban las maniobras”, explicó un investigador.
En 1.000 horas de interceptaciones legales a teléfonos de sus directivos
queda en evidencia cómo, mientras se triangulaban giros de manera oscura,
Interbolsa adquiría propiedades y obras de arte, abría la Bolsa de New York,
fundaba filiales en Brasil y EE. UU., negociaba un avión e invertía en
empresas con gran figuración, como el equipo de fútbol los Millonarios y la
aerolínea Easy Fly, entre muchas otras.
Además reclutaba a los mejores ejecutivos, especialmente a los que habían
pasado por organismos de control, y buscaba acercarse a funcionarios del
Gobierno y a empresarios de quilates.
El expresidente de Valorem Carlos Carreño y el inversionista español Javier
Aguirre (novio de Noemí Sanín), por ejemplo, mediaron entre el grupo empresarial
y Proyectar Valores cuando la debacle de esta última empezó a salpicar a los
Jaramillo.
Por ahora, sin la coraza que les daba ese poder, Tomás Jaramillo iniciará su
colaboración este martes, y su padre, Rodrigo, seguirá hablando la próxima
semana.
Ortiz ofrece
recuperar $ 30 mil millones
Desde que estalló el escándalo de Interbolsa, en noviembre del 2012, Juan
Carlos Ortiz, uno de sus accionistas y otrora ejecutivo clave, dijo que él había
salido del grupo hacía dos años y que no era culpable de la debacle. Por ende,
que no tenía por qué responder.
Pero hace seis días, el polémico economista –expulsado en los 90 de la Bolsa
de Bogotá por prácticas no aceptadas– cambió súbitamente de discurso. Luego de
que supo que sus exaliados, los Jaramillo, iban a colaborar con la Fiscalía,
empezó a ofrecerle ayuda al abogado Jaime Granados, quien defiende los intereses
de los inversionistas de Premium. “El lunes me reuní con el doctor Granados con
la intención de explorar las posibilidades de aportar mi experiencia en la
recuperación de parte de los dineros de Premium. Lo fundé con Tomás, y eso me
impulsa a apoyar todo lo que esté a mi alcance para que los inversionistas
recuperen su plata”, explicó Ortiz.
Y agregó: “No tengo responsabilidad en las decisiones que llevaron al Fondo,
y menos a Interbolsa, a su situación actual, pero el hecho de haberme separado
de Premium, sin ‘firmar los papeles de divorcio’, me lleva a ayudar”.
Este martes, Ortiz le propondrá a Granados que le entregue una cartera por
$60.000 millones, de la que se compromete a recuperar mínimo la mitad. Para
hacerlo, pide tres años y para respaldar el acuerdo entregará en garantía un
apartamento de $3.200 millones y un pagaré. Al respecto, Granados advirtió que
cualquier acuerdo debe incluir la reparación a las víctimas y la colaboración
con la Fiscalía: “En ese punto fui muy claro y estoy esperando que oficialice la
oferta”.
De otro lado, Ortiz le aseguró a este diario que ni Premium ni Rentafolio ni
la firma Intertours captaron dinero ilegalmente ni blanquearon recursos de
“clientes amigos”. Y negó las versiones sobre la existencia de la caja fuerte y
de manejo de dinero en efectivo. Esa será una de las preguntas que le hará la
Fiscalía cuando sea citado.
Los 11.200 millones
de Millonarios
Aunque Juan Carlos Ortiz es el único accionista de Interbolsa que
sigue vinculado al equipo de fútbol Millonarios, las autoridades van a chequear
la inyección de capital –$ 11.200 millones– que le hicieron al nuevo Azul y
Blanco varios ejecutivos de ese grupo y de la liquidada Proyectar
Valores. De hecho, se evalúa si se llama a entrevista a José Roberto Arango, a
quien se le atribuye haber saneado financieramente el equipo.
Rentabursátil e
Intertourist, otras grandes captadoras
La caja fuerte, cuyos retiros –dicen testigos– aprobaban Rachid Maluf y Juan
Andrés Tirado, es solo una de tres fuentes de ingreso de plata que deberán
explicar los implicados en este caso. La Superfinanciera tiene evidencia de que
hubo captación ilegal en Rentafolio Bursátil, filial de Premium. Esta firma, ya
intervenida, irrigó a empresas personales de varios socios de Interbolsa.
Hasta el 2008, Rentafolio era de los padres y de la hermana de Juan Carlos
Ortiz. Y aunque no podía captar dinero, se probaron operaciones por 12.000
millones de pesos, entre el 2009 y el 2010. En este caso, la plata tampoco salió
del país.
Otra transacción que interesa a las autoridades es la que liga a Premium
directamente con los grandes negocios de Interbolsa.
El abogado Jaime Granados documentó cómo Alessandro Corridori, el hombre de
los repos de Fabricato, obtuvo 60.000 millones de pesos de Valores Incorporados
y de Andean Markets S.A., otras filiales de Premium.
Al respecto, ejecutivos claves ligados a ese fondo, como Ricardo Emilio
Martínez, vienen colaborando con las autoridades. Martínez, administrador de 36
años, es el representante suplente de Rentabursátil y tiene nexos con Valores
Incorporados e Intertourist. A través de esta última firma –propiedad de Ortiz y
Tomás Jaramillo– entró dinero que, de acuerdo con la Súper, no está en la
contabilidad de Premium. No obstante, Ortiz dice que se manejó legalmente a
través del llamado mercado secundario. Y aunque la defensa de Maluf negó
cualquier tipo de captación ilegal o lavado, no descartó la violación de algunas
normas cambiarias.
Los Nule y
Proyectar Valores
Fiscalía indaga el origen de sus inversiones en
común
En el entramado de empresas y transacciones de Interbolsa volvieron a
aparecer los Nule. Esta semana, la Fiscalía pidió desempolvar las inversiones
que empresas de ese grupo –cuyas cabezas están presas por el ‘carrusel’ de la
contratación– tenían en Proyectar Valores, la comisionista intervenida
y liquidada, con nexos íntimos con Interbolsa. “El propósito es establecer el
origen del dinero que entregaron y de lo que también tenían en Proyectar otras
firmas ligadas a los Nule, como Enertolima y Enerpereira”, explicó un
investigador.