Entre los retos están la sostenibilidad social, así como disminuir los niveles de déficit y de deuda pública, e impulsar la reactivación
Después de un año y medio desde la llegada del covid-19, las economías latinoamericanas deberán enfrentar una serie de retos para, no solo dejar atrás la crisis social y económica de la pandemia, sino también solucionar problemas estructurales que venían de años atrás.
En ese sentido, durante el Foro LR ‘Lacea Lames 2021: Desafíos económicos en América Latina’, el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, aseguró que un primer desafío será la sostenibilidad social, teniendo en cuenta que el año pasado aumentó la incidencia de la pobreza.
Con este punto estuvo de acuerdo Carlos Sepúlveda, decano de Economía de la Universidad del Rosario, quien aseveró que se debe poner un enfoque tanto en la pobreza monetaria, que afectó principalmente a las zonas urbanas, como a la pobreza multidimensional, cuyo impacto fue mayoritariamente rural.
LOS CONTRASTES
Juan Camilo PardoAnalista económico de Corficolombiana
“Para atacar los niveles de pobreza se debe impulsar el crecimiento económico, a partir de la mejora en la calidad de las instituciones y la mayor inversión”.
Un segundo desafío sería el de la sostenibilidad fiscal, pues para enfrentar la crisis los gobiernos de la región tuvieron que hacer mayor gasto público, lo que implicó aumentos en los déficit fiscales y la deuda.
Según Restrepo, las naciones latinoamericanas deberán empezar a reducir los déficit fiscales de forma gradual y ordenada, sin afectar a la reactivación económica. En el caso de Colombia, el viceministro técnico, Jesús Bejarano, aseguró que ya se empezó a hacer un esfuerzo fiscal con la última reforma tributaria.
“Con la Ley de Inversión Social logramos conseguir ingresos permanentes para garantizar los pagos de la deuda que tenemos y poder seguir atendiendo los programas económicos y sociales”, dijo Bejarano.
El tercer desafío, según los expertos, es el de la recuperación económica, en la que se debería atender a los sectores más afectados por la pandemia, así como poner un énfasis especial en las regiones.
Por último, las economías latinoamericanas también deberán enfrentar los retos estructurales que existían antes de la llegada del covid-19, tales como aprovechar de mejor manera los mercados internacionales, mejorar las cadenas logísticas, tener exportaciones de mayor valor agregado, y hacer reformas laborales y pensionales.
“Los desafíos no son solamente superar los estragos que ha dejado una pandemia en empleo, pobreza e iniquidad, se trata también de seguir trabajando en estas materias estructurales”, dijo Restrepo.
Se debe buscar la sostenibilidad empresarial y ambiental
El ministro Restrepo señaló que las economías no solo deben reactivarse y generar empleo, sino que también deben buscar la sostenibilidad a nivel empresarial y ambiental. “Este es un desafío para los próximos años, que implica extender la economía circular, masificar las energías renovables y reducir los gases de efecto invernadero”, dijo.
Política monetaria, un activo del país
A pesar de la dolarización en otros países de la región, Carlos Sepúlveda, decano de Economía de la Universidad del Rosario, aseguró que la flexibilidad cambiaria y la institucionalidad macroeconómica son “un gran activo. Tener la posibilidad de manejo de la política monetaria complementa el modelo económico de manera positiva”.
Atacar las deficiencias de capital humano
Entre los retos de sostenibilidad social, la presidente del Consejo Privado de Competitividad, Ana Fernanda Maiguascha, aseguró que se deberá afrontar la deficiencia de capital humano, que empeoró con la virtualidad en la educación durante la pandemia, dado que el acceso a la tecnología es desigual en las diferentes regiones.
Reactivación desde las regiones
Según los expertos, en la reactivación se debe poner un énfasis especial en las regiones y, en ese sentido, Jesús Bejarano, el viceministro técnico del Ministerio de Hacienda, aseguró que es necesario el desarrollo de la infraestructura vial del país y así apoyar proyectos que generen mayor valor agregado en los diferentes territorios.