Una queja recurrente de los empresarios, tras la última reforma tributaria, ha sido la carga impositiva que ahora tienen que llevar. Gloria Nancy Jara, defensora del Contribuyente de la Dian, aseguró en Inside LR que las quejas este año han aumentado 126%.
¿Cómo cierra este 2015 en términos de quejas?
Como Defensoría recibimos 1.700 quejas, aproximadamente. Las más recurrentes son asistencia al cliente, el uso de los sistemas electrónicos, la simplicidad del sistema tributario, además, devoluciones es un tema que marca mucho en términos de quejas.
¿En Bogotá es donde más se reciben reclamaciones?
La Defensoría para atender las quejas a nivel del país cuenta con seis delegados: uno en Bogotá y tenemos sedes en Barranquilla, Pereira, Cali, Medellín y Bucaramanga. Casi 60% de las quejas se radican en Bogotá, no obstante, cuando vamos a otras ciudades y, en la medida en que hay mayor presencia, comienzan a incrementarse.
¿Estas han sido mayores respecto a años anteriores?
Hemos tenido un incremento importante. Algo que ha marcado las quejas son las dos últimas reformas tributarias. En la medida en que se hacen, los contribuyentes sienten que la norma no es oportuna, no se dan los tiempos de transición para que se pueda aplicar. Ha sido uno de los instrumentos que ha generado mayores protestas. Pasamos de tener 500 quejas, a casi duplicarlas este año en un 126%, con el último reporte.
¿Se vulneran los derechos del contribuyente?
Sí. Parte del trabajo que hacemos como Defensoría es ser un mecanismo de prevención de riesgos y de la vulneración de los derechos.
¿Cómo califica la cultura del pago de impuestos?
Así como hay derechos, hay deberes. El primero es contribuir con las cargas fiscales del Estado. En la medida en la que contribuyan todas las personas, habrá menos vulneración de derechos, porque parte de lo que sienten muchos contribuyentes es que sobre los cumplidos recae la carga tributaria. Es claro que Colombia necesita mayor cultura tributaria y educación fiscal. Hay sectores donde no les gusta pagar impuestos. Uno de los retos son las cifras de evasión: en renta de 39%, 2,5 del PIB. Las cifras en contrabando son de US$6.000 millones.
¿Cuál es la mejor forma de ampliar la base de tributación?
Hay que concientizar a los colombianos. Un país que tributa y cancela sus impuestos, va a tener mejores condiciones en infraestructura, salud y educación. Hay 3,5 millones de personas que pagan renta, no obstante, en el RUT hay registrados 11.000 personas naturales y empresas. Hay algo que hay que revisar en el ejercicio económico. La mejor manera es que haya un sistema tributario muy sencillo, racional, justo y equitativo. Que todos paguemos, pero paguemos lo justo. Pero sobre todo que sea muy sencillo de tributar y que la gente sienta que esos recursos que está dando se invierten.
¿Qué expectativas tiene sobre la reforma tributaria?
Es una oportunidad única, que se haya constituido por primera vez una comisión de expertos es muy bueno. Esta nueva reforma debe traer la revisión de las cargas tributarias. Hay empresarios que sienten que son altas. No les permite ser competitivos. El segundo tema, es seguridad jurídica. Se presentó un estudio de buenas prácticas en otros países y, por ejemplo, se tienen periodos de transición. Usted no sale con una reforma tributaria sin darle el tiempo para que los empresarios puedan prepararse para cumplir.
¿Es necesario simplificar el Estatuto Tributario?
Totalmente. Con estudios se demuestra que entender la normativa puede demorar diez años. El reto es simplificarlo, reducir el número de artículos hace el proceso más sencillo.
¿Recibió quejas de la industria con la antigua reforma?
Ellos dicen que por qué solo en unos recae la carga tributaria. Se está hablando de cifras de evasión de 39%, por qué no logra controlarse la evasión, para no generar mayores cargas a los que siempre tributamos. La segunda queja es la seguridad jurídica y es que cuando se hacen de manera recurrente reformas tributarias, no se ha preparado la infraestructura para cumplir una, cuando ya sale otra. Eso genera costos de cumplimiento. El otro es que genera riesgos jurídicos por pleitos, porque si la norma no está afianzada se pueden generar discusiones de carácter jurídico como demandas.
¿Cómo debe tratarse a las entidades sin ánimo de lucro?
Lo que le ha preocupado al Gobierno es que haya prácticas donde se utilice la figura sin ánimo de lucro, para generar cierto tipo de conductas que no están asociadas con la finalidad de la función social. El gran reto de la comisión es verificar que hay unas prácticas donde la gente incluye costos, deducciones, que no son pero no siempre se da de esta forma.
¿Cuándo estará la versión final del Estatuto Aduanero?
Cuando iniciamos, 60% de las quejas eran aduaneras, más que tributarias. Eso se ha invertido, porque la gente sentía que el Estatuto que había no era un instrumento que facilitara el comercio y permitiera la competitividad. Un estudio que presentamos muestra que se les acogió 78% de las peticiones que hicieron los usuarios del comercio exterior. Están listos a expedir el nuevo Estatuto.
El perfil
Gloria Nancy Jara es contadora pública de la Universidad de la Salle, cuenta con un Magíster Internacional en Hacienda Pública en el Instituto Estudios Fiscales de España. Además, es especialista en Gobierno Municipal de la Universidad Javeriana y especialista en Finanzas Públicas de la Esap. Hace tres meses fue ratificada para un nuevo periodo. Para Jara son al menos tres los elementos de un buen sistema tributario: impuestos sencillos, cargas que consulten la capacidad del contribuyente y una buena cultura donde la contribución sea parte de todos.