Una de las iniciativas humanas más exitosas de las últimas décadas es la notable fuerza que están alcanzando la filantropía y los voluntariados.
Cuerpo de la Noticia:
Las inmensas cantidades de dinero donadas por millonarios y por empresas, con carácter de entrega filantrópica, están empujando de modo decisivo todo tipo de acciones para la reducción de la pobreza, curación de enfermedades, asistencia sanitaria y cultural.
Por su parte, los voluntarios se mueven a otro nivel, más cercano, más hacia tareas muy concretas en cada momento y lugar pero que, unidas a las labores de otros voluntarios, constituyen una masa arrolladora. Son millones de personas en todo el mundo y los hemos visto en grandes acontecimientos deportivos, en grandes concentraciones, en grandes catástrofes y en muchos otros ámbitos. Siempre allí donde hiciera falta completar la labor de autoridades de todo tipo porque de otra manera era imposible, tanto por coste como por logística, organizar eventos, atender a damnificados o colaborar ante desastres.
En los últimos años las crisis financieras han acentuado algo que ya se sabía: la falta de educación financiera en grandes sectores de nuestras sociedades, aun de las más desarrolladas, han empeorado la situación de muchas familias y pequeñas empresas que, con ella, con educación financiera, no habrían caído en tantos errores como se han cometido.
Por esta razón, los gobiernos y los Bancos Centrales han acelerado planes de formación en finanzas, que ya existían, a nivel de cada país pero ante la imposibilidad material de los Estados modernos de afrontar tan gigantesca tarea, han surgido en muchas naciones los voluntarios financieros.
En Cataluña, con el soporte del Gobierno de la Comunidad Autónoma, el apoyo de grandes Bancos españoles y organizado por el Instituto de Estudios Financieros IEF, se ha iniciado la segunda campaña de educación financiera en las escuelas catalanas, formando previamente en finanzas-y éste es el elemento diferencial- a más de 400 voluntarios que posteriormente irán a las aulas a enseñar finanzas básicas a unos 13.000 alumnos.
En el pasado ejercicio más de 200 voluntarios del sector financiero -profesionales en activo o personas del sector que ya gozan de jubilación- han impartido unos 1.300 talleres sobre finanzas a 6.600 alumnos catalanes de cuarto curso de la Enseñanza Secundaria Obligatoria. Este programa de alfabetización y de educación financiera se enmarca en las recomendaciones de organismos internacionales tales como la Ocde y la Unión Europea. Se debe dotar a los ciudadanos -ya desde edades tempranas de adolescencia y juventud- de mejores competencias en materias financieras con objeto de que puedan gestionar sus ahorros y puedan comprender y decidir sus niveles de endeudamiento para que no caigan en errores de sobreendeudamiento que tan graves problemas han ocasionado en años recientes en tantos países.
La iniciativa es tan exitosa en su planteamiento y resultados que este voluntariado financiero de gran envergadura se está extendiendo a otras Comunidades Autónomas españolas, lo que significa que, en breve, van a existir varios miles de voluntarios formándose -lo cual ya es positivo en sí mismo- para luego ir a escuelas y colegios y formar a la juventud.
De repente, en pocos años, la era digital ha invadido también el ámbito financiero-bancario y hemos pasado de ir al Banco para casi todas las operaciones, a realizarlas desde el teléfono móvil, el tablet o el computador. Al mismo tiempo las entidades financieras ofrecen nuevos e interesantes productos. Y sin embargo, a nivel general, muy poco ha mejorado nuestra cultura financiera, como revelan con insistencia las encuestas.
El voluntariado de enseñanza financiera supone, por tanto, una enorme palanca en esta gigantesca tarea educativa que a todos nos incumbe.
Por su parte, los voluntarios se mueven a otro nivel, más cercano, más hacia tareas muy concretas en cada momento y lugar pero que, unidas a las labores de otros voluntarios, constituyen una masa arrolladora. Son millones de personas en todo el mundo y los hemos visto en grandes acontecimientos deportivos, en grandes concentraciones, en grandes catástrofes y en muchos otros ámbitos. Siempre allí donde hiciera falta completar la labor de autoridades de todo tipo porque de otra manera era imposible, tanto por coste como por logística, organizar eventos, atender a damnificados o colaborar ante desastres.
En los últimos años las crisis financieras han acentuado algo que ya se sabía: la falta de educación financiera en grandes sectores de nuestras sociedades, aun de las más desarrolladas, han empeorado la situación de muchas familias y pequeñas empresas que, con ella, con educación financiera, no habrían caído en tantos errores como se han cometido.
Por esta razón, los gobiernos y los Bancos Centrales han acelerado planes de formación en finanzas, que ya existían, a nivel de cada país pero ante la imposibilidad material de los Estados modernos de afrontar tan gigantesca tarea, han surgido en muchas naciones los voluntarios financieros.
En Cataluña, con el soporte del Gobierno de la Comunidad Autónoma, el apoyo de grandes Bancos españoles y organizado por el Instituto de Estudios Financieros IEF, se ha iniciado la segunda campaña de educación financiera en las escuelas catalanas, formando previamente en finanzas-y éste es el elemento diferencial- a más de 400 voluntarios que posteriormente irán a las aulas a enseñar finanzas básicas a unos 13.000 alumnos.
En el pasado ejercicio más de 200 voluntarios del sector financiero -profesionales en activo o personas del sector que ya gozan de jubilación- han impartido unos 1.300 talleres sobre finanzas a 6.600 alumnos catalanes de cuarto curso de la Enseñanza Secundaria Obligatoria. Este programa de alfabetización y de educación financiera se enmarca en las recomendaciones de organismos internacionales tales como la Ocde y la Unión Europea. Se debe dotar a los ciudadanos -ya desde edades tempranas de adolescencia y juventud- de mejores competencias en materias financieras con objeto de que puedan gestionar sus ahorros y puedan comprender y decidir sus niveles de endeudamiento para que no caigan en errores de sobreendeudamiento que tan graves problemas han ocasionado en años recientes en tantos países.
La iniciativa es tan exitosa en su planteamiento y resultados que este voluntariado financiero de gran envergadura se está extendiendo a otras Comunidades Autónomas españolas, lo que significa que, en breve, van a existir varios miles de voluntarios formándose -lo cual ya es positivo en sí mismo- para luego ir a escuelas y colegios y formar a la juventud.
De repente, en pocos años, la era digital ha invadido también el ámbito financiero-bancario y hemos pasado de ir al Banco para casi todas las operaciones, a realizarlas desde el teléfono móvil, el tablet o el computador. Al mismo tiempo las entidades financieras ofrecen nuevos e interesantes productos. Y sin embargo, a nivel general, muy poco ha mejorado nuestra cultura financiera, como revelan con insistencia las encuestas.
El voluntariado de enseñanza financiera supone, por tanto, una enorme palanca en esta gigantesca tarea educativa que a todos nos incumbe.
