Colapsa cada vez que los contribuyentes tienen un pago de impuestos clave. Incompatibilidad en el software sería la razón.
Volvió a suceder. Los sistemas informáticos les volvieron a pasar cuenta de cobro a la Dian y a miles de contribuyentes que intentaban cumplir las fechas establecidas por la entidad recaudadora para pagar la retención en la fuente del nuevo impuesto conocido como Cree.
Aunque las cifras de la Dian reportan que el 95 por ciento de las declaraciones de impuestos que tenían como última fecha de presentación el pasado 15 de enero ya se habían realizado cuando se presentó el colapso, miles de aportantes de tributos ya empiezan a preocuparse pues -según reclaman- desde el 2011 se viene hablando, inclusive, de exigir la informatización para el pago de impuestos. “Cada vez se señala un plazo para que se acaben los problemas, pero en esas llevamos tres años”, indica el contador de una empresa contribuyente.
En febrero del 2012 se presentó una gran falla y se habló de un mes de plazo para solucionarla. En agosto del año pasado la entidad había establecido la obligatoriedad de presentar la declaración y el pago del impuesto sobre la renta para la equidad, Cree, solo a través de los servicios electrónicos para todo aquel que cuente con el mecanismo de firma digital.
Pero siempre se ha requerido de nuevo un plan de contingencia. Según denuncian varios contribuyentes, “esta semana en Bogotá hubo congestiones constantes. El lunes se cayó el sistema dos veces y el martes una hasta que colapsó el miércoles. Tuvieron que volver a los formularios impresos”.
LA SOLUCIÓN NO ESTÁ CERCA
El director de la Dian, Juan Ricardo Ortega, habló ayer de una nueva ‘tregua’, pues se requerirán al menos cinco meses para darle solución a los inconvenientes técnicos de la entidad. “Las nuevas versiones que ahora están sacando de JAVA son incompatibles con lo que la Dian montó en el 2006”, dijo.
Para la modernización de los equipos físicos de la Dian se destinaron el año pasado recursos por 80 mil millones de pesos, pero los problemas persisten. Representantes de uno de los sindicatos de la entidad señalan que “a los funcionarios les toca apagar el sistema y esperar de 5 a 10 minutos y reiniciar. El proceso es lento”.
