Banca, regulación o autogobierno

 
Desde hace un tiempo los banqueros colombianos andan enfadados. Y los clientes también.
 
Los banqueros creen que las autoridades, el Congreso y organismos internacionales (Basilea III) imponen demasiadas regulaciones y costos a sus actividades. Los clientes creen que podrían estar mejor atendidos y que los precios de los servicios bancarios son elevados. Ambos están descontentos.
No se alarmen. Por un lado se trata de un proceso históricamente cíclico de regulación- desregulación bancaria que se repite. Por otro lado este hecho sucedió y sucede en muchas naciones. Lean hoy un diario económico en Tokio, en Nueva York o en Europa y lo comprobarán: regulación, malestar bancario y clientes irritados. ¿Y entonces? ¿Qué está pasando?

Desde la época griega los servicios bancarios son imprescindibles para el desarrollo de las naciones. Los bancos, como empresas que son, se mueven dentro de unos parámetros de rentabilidad y liquidez, dentro de unas leyes que deben regir su actividad. Pero algunos banqueros han abusado de su posición.

Isócrates (395 a. C) ya cita “a las gentes de banca, que tienen muchos amigos, manejan mucho dinero y parecen de confianza por razón de su oficio”. También relata varios casos de malestar de los clientes de los banqueros y lo mismo hace el orador Demóstenes.

Excelentes y largas descripciones de hace más de 2.000 años que podrían haberse escrito en Nueva York, Madrid o Bogotá ayer mismo.

El derecho romano, la prohibición de la usura en las tres grandes religiones durante la Edad Media y la historia de los banqueros de Florencia -los Medicis- nos conducen al núcleo del problema en la Edad Moderna. Frente a los abusos de los banqueros reaccionaban los reyes con sus edictos de protección de los clientes. Más tarde -Carlos I de España en 1545, agradecido por la financiación de las guerras y de la expansión del Imperio que le proporcionaban los banqueros Espinosa, Morga y Fugger- liberaban de impuestos, repartían encomiendas y dejaban que los propios banqueros organizasen su actividad. Ya existía entonces regulación frente a autogobierno.

En 1609 aparece el Banco de Amsterdam y la historia se repite. Cien años después en Hamburgo, Venecia y Génova vuelven a intervenir las autoridades para la protección de los comerciantes-clientes ante los abusos de la banca. Adam Smith, Stuart Mill y especialmente Thornton pusieron en Inglaterra las bases de la banca actual, que sigue debatiéndose - en los últimos 200 años- entre aceptar injerencias en su negocio o crear productos financieros que sorteen las limitaciones impuestas por las autoridades, ya sea en América, Norte y Sur, Europa y también en Colombia.

O sea que la cosa ya viene de lejos. Desde luego yo soy firme partidario del autogobierno bancario, en la línea del liberalismo económico de la escuela de Chicago de Milton Friedman.

Las autoridades deben fijar las reglas de juego, pero cada banco debe saber autocontrolarse, mantenerse fiel a sus principios, dar excelentes servicios.

La excesiva y prolija regulación se ha demostrado, aquí y allá, que de poco sirve. Hay muchos estudios sobre este tema. Pero a quien abuse de los clientes y viole las leyes fundamentales de la banca, deben exigírsele graves y severas responsabilidades. Y si deben quebrar, como el gigante Lehman Brothers, pues que quiebren.

Los banqueros colombianos no deben alarmarse. Los clientes tampoco. Vivimos ahora en todas partes un ciclo de leyes, decretos, regulaciones sobre la banca…, nada que no haya sucedido en los 2.000 años anteriores. Seguirá después, con toda certeza, un ciclo de desregulación.

Mientras tanto, la era digital ha abierto para los bancos unas perspectivas insospechadas que, tal vez por primera vez en la dilatada historia de 2.000 años de banca, permite conjugar excelente satisfacción del cliente con altas rentabilidades.

Muchos bancos -y no necesariamente los grandes- ya disfrutan de esta posición. En mi próximo escrito les diré cómo lo hacen.

Mi Contabilidadcom

Somos una firma colombiana con domicilio principal en Manizales, contamos con más de 15 años de experiencia profesional en el campo de la auditoria financiera, de gestión, y de sistemas, así como en el campo de revisoria fiscal. Contamos con un grupo de profesionales especializado en temas tributarios y de NIIF, temas que en la actualidad son imprescindibles en cualquier organización.

Publicar un comentario

Gracias por sus comentarios... siempre buscamos mejorar

Artículo Anterior Artículo Siguiente