El debate se origina porque los costos asociados a la implementación y mantenimiento de un sistema de este tipo podrían resultar insostenibles para las pymes.
Las pymes se preparan para afrontar una verdadera revolución en materia contable pues desde este año empiezan a regir las NIIF con las cuales se busca impulsar su competitividad. ¿Cuáles son los desafíos en su adopción?
Con la puesta en marcha de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), las pymes colombianas tienen el reto de realizar reformas estructurales en el campo organizacional, que van desde la capacitación del personal y la contratación de consultores, hasta la actualización del software con el que se realizan los cálculos.
El debate se origina porque los costos asociados a la implementación y mantenimiento de un sistema de este tipo podrían resultar insostenibles para las pymes, que a su vez se enfrentan a la falta de financiación, altos costos de formalización y dura competencia con los productos importados.
Así lo explica un reciente informe del experto en economía de la Universidad Nacional (UNAL), Mauricio Gómez, quien argumenta que “hasta el momento no se conocen los estudios técnicos sobre el impacto que tendrá la aplicación de las NIIF en las pymes”.
La adopción de estas normas, según el documento publicado por la agencia de noticias de esa institución, responde a una simple “tendencia” pues los argumentos que la sustentan “parecen ser más publicitarios que basados en evidencias”.
El “Estado debe comprender mejor el contexto y las necesidades para la productividad de las pymes, ya que necesitan una información con un enfoque diferente a la que requieren las grandes empresas”, sentencia el documento.
Y agrega que este sistema debería “viabilizar” y “apoyar la gestión” de los pequeños y medianos empresarios, en lo que respecta al control de los recursos y la rendición de cuentas a terceros.
Partir de la diferencia
En teoría, la adopción de las NIIF se traduce en un mayor conocimiento de la compañía y, por consiguiente, un mayor rendimiento de la misma. Además supone una necesidad para los empresarios que quieren insertarse de manera más efectiva a los mercados internacionales, acuerdos comerciales e inversionistas.
Sin embargo, varios expertos han coincidido en que su aplicación puede ser riesgosa si no se realiza una debida distinción entre los objetivos de las pymes y el de las grandes firmas que “buscan proveer información útil para los inversores en mercados de valores”, según lo explica Gómez.
Dicha norma, en palabras del docente, “desconoce que en las pymes la información para decidir es otra y que se relaciona más con la eficiencia de las políticas de producción, mercadeo, gestión y control que el propio empresario realiza”.
“Por lo general, las pymes no cotizan en bolsa y su propiedad es personal, familiar o cerrada”, argumentó Gómez, al explicar la importancia de realizar una investigación más profunda con respecto a los beneficios directos de este sistema en cada segmento.
Esta discusión es trascendental en la medida en que, según cifras del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, las pymes generan el 30,5 % de los empleos a nivel nacional, mientras que las microempresas más del 50%.
A puertas de las NIIF
Las empresas que trabajan con activos biológicos (plantas o animales) son uno de los grupos que estarían rezagados en materia de información financiera, según lo expuso una investigación de Diana Agudelo de la UNAL.
Uno de los problemas tiene que ver con la adopción del ‘valor razonable’ en dichos productos, un criterio de medición con el que no estaban familiarizados los profesionales contables en el país. ¿Qué es lo bueno y lo malo de ese sistema?
En el caso del sector cafetero, por ejemplo, se estableció que ese método es “la representación más cercana a la realidad, pues tiene en cuenta factores determinantes como la evolución de las plantaciones”.
Sin embargo, “se pueden presentar inconsistencias relacionadas con la fiabilidad de las cifras, producto del uso de bases estadísticas que no están relacionadas con la realidad económica”, contrasta el informe. Al final del análisis, concluye que la aplicación de las NIIF debería contemplar aspectos como “el funcionamiento del mercado en general”, así como “las características internas de la organización y su entorno” para que sean viables.