La ola vendedora en los mercados globales de petróleo mostraba hoy pocas señales de ceder con el nuevo año, luego de que el crudo en Estados Unidos cayera bajo la barrera de los US$50 por barril por primera vez desde abril de 2009, ante los temores de un sobreabastecimiento.
El referencial Brent se derrumbó cerca de un 6% hasta mínimos de cinco años y medio, por datos que mostraron que la producción de Rusia alcanzó máximos de la era post-soviética y que las exportaciones iraquíes se encuentran en su mayor nivel en casi 35 años.
La firma estadounidense de exploración ConocoPhillips exacerbó la tendencia bajista al anunciar el primer bombeo de crudo desde un proyecto noruego en el Mar del Norte.
El contrato vigente para los futuros del crudo en Estados Unidos caía US$2,46 o 5%, a US$50,23 el barril a las 16:48 GMT, tras haber retrocedido previamente a US$49,95.
Los precios del petróleo Brent rondaban los US$53 dólares el barril, un descenso de más de US$3, después de haber cedido a US$52,66, su menor nivel desde mayo de 2009.
"No hay duda de que tenemos una combinación de suministros que están alcanzando su cénit en momentos en que la demanda se está debilitando", dijo Phil Flynn, analista de Price Futures Group en Chicago.
Algunos operadores parecen seguros de que el crudo en Estados Unidos caerá esta semana hasta cerca de los US$40 dólares si el miércoles las cifras semanales de inventarios del país muestran otro aumento significativo.
La producción de petróleo de Rusia alcanzó el año pasado su mayor nivel de la era post-soviética, al promediar 10,58 millones de barriles diarios (bpd), un aumento del 0,7%, según datos del Ministerio de Energía.
En tanto, las exportaciones de crudo de Irak se ubicaron en su mayor punto desde 1980 en diciembre, según un portavoz del Ministerio del Petróleo, gracias a las ventas récord realizadas por los terminales del sur del país.
Acciones caen
Las acciones europeas retrocedieron el lunes a mínimos de dos semanas, ante preocupaciones sobre el futuro de Grecia en la zona euro y una fuerte caída en los precios del petróleo y del cobre que castigaron principalmente a los sectores financiero y de materias primas.
El índice Euro STOXX 50 de los principales valores de la zona euro cerró con una caída del 3,78%, mientras que el paneuropeo FTSEurofirst 300 perdió un 2,27% y terminó extraoficialmente en 1.332,28 puntos.